Saltar al contenido principal

El Proyecto de la literatura puertorriqueña El Proyecto de la literatura puertorriqueña

Soy lo que soy (trad.)

Aurora Levins Morales

Traducido del Inglés por Alejandro Álvarez Nieves

2003

Soy lo que soy. 

Hija de América. 

Una mestiza caribeña de piel clara.

Hija de muchas diásporas, nacida en este continente en un cruce.

 

Soy puertorriqueña. Soy americana de Estados Unidos. 

Soy de Nueva York, Manhattan y el Bronx. 

Una niña jíbara, nacida en la montaña, criada en el campo, 

arriba en un shtetl, una judía californiana puertorriqueña

producto de todos los guetos neoyorquinos que nunca he conocido. 

Soy inmigrante

y la hija y nieta de inmigrantes. 

No sabemos los nombres de nuestros antecesores con certeza. 

No están escritos en ninguna parte. 

Solo el nombre de pila o mija, negra, ne, honey, sugar, cariño

 

Vengo del polvo donde se cultivaba la caña. 

No asistíamos a cenas formales. No nos invitaban. 

Soy caribeña, criada en una isla. 

Llevo el español en la carne, ondula desde muy lengua, se aloja en mis caderas, 

el idioma del ajo y los mangós. 

Boricua. Como los boricuas provienen de la isla de Manhattan. 

Soy de latinoamérica, arraigada en la historia de mi continente. 

Hablo desde ese cuerpo. Apenas moreno y rosado, repleto de tambores.

 

No soy africana. 

Las aguas de África riegan las raíces de mi árbol, pero no puedo regresar. 

 

No soy taína. 

Soy una hoja tardía en ese árbol antiguo, 

y mis raíces se adentran en el suelo de las dos Américas. 

Lo taíno está en mí, pero no hay camino de regreso. 

 

No soy europea, aunque he soñado con esas ciudades. 

Cada plato es distinto,

madera, arcilla, papel maché, metales, mimbre; una hoja, una cáscara de coco. 

Europa está en mí, pero no tengo un hogar allí. 

 

La mesa cuenta con un mantel tejido por una, teñido por otra, 

bordado por otra más. 

Soy hija de muchas madres. 

Han mantenido vivo todo esto. 

 

Todas las civilizaciones erguidas sobre sus espaldas. 

Todas las cenas formales celebradas con su labor. 

 

Somos nuevas. 

Nos dieron la vida, nos mantuvieron en pie

nos trajeron hasta donde estamos. 

Nacidas en un cruce. 

Ven, deja ese paño de lavar platos. Come, cariño, come. 

Nos forjó la historia. 

Ya no nos comeremos más por dentro. 

 

Y estamos enteras. 

Derechos: Aurora Levins Morales

Ending Poem

Aurora Levins Morales

2003

I am what I am.
A child of the Americas.
A light-skinned mestiza of the Caribbean.
A child of many diaspora, born into this continent at a crossroads.

 

I am Puerto Rican. I am U.S. American.
I am New York Manhattan and the Bronx.
A mountain-born, country-bred, homegrown jíbara child, up from the shtetl, a California Puerto Rican Jew
A product of the New York ghettos I have never known. I am an immigrant
and the daughter and granddaughter of immigrants.
We didn't know our forbears' names with a certainty.
They aren't written anywhere.
First names only or mija, negra, ne, honey, sugar, dear

I come from the dirt where the cane was grown.
My people didn't go to dinner parties. They weren't invited.
I am caribeña, island grown.
Spanish is in my flesh, ripples from my tongue, lodges in my hips, the language of garlic and mangoes.
Boricua. As Bóricuas come from the isle of Manhattan.
I am of latinoamerica, rooted in the history of my continent.
I speak from that body. Just brown and pink and full of drums inside.


I am not African.
Africa waters the roots of my tree, but I cannot return.

 

I am not Taína.
I am a late leaf of that ancient tree,
and my
roots reach into the soil of two Americas.
Taíno is in me, but there is no way back.

 

I am not European, though I have dreamt of those cities.
Each plate is different.
wood, clay, papier mâché, metals, basketry, a leaf, a coconut shell.
Europe lives in me but I have no home there. 

The table has a cloth woven by one, dyed by another
embroidered by another still.
I am a child of many mothers.
They have kept it all going.

 

All the civilizations erected on their backs.
All the dinner parties given with their labor. 

 

We are new.
They gave us life, kept us going,
brought us to where we are.
Born at a crossroads.
Come, lay that dishcloth down. Eat, dear, eat.
History made us.
We will not eat ourselves up inside anymore.

And we are whole. 

Derechos: Aurora Levins Morales