Mis últimos tres encuentros con Eugenia
I
eugenia bonita de pelo largo
tan bella sobre el jardín de malvas
mujer primera
mujer última
para hacer el amor con los ojos
(en alguna ocasión se acostaron: yo y tu mirada)
tu pudor en juego/ mi plagiario contra los santos que te redimen
a pocos metros sobre el nivel del mar
no lejos del puerto sin pretensiones
la ciudad de los reyes al mediodía
bajo un sol asceta
de escondrijo en escondrijo
–o sencillamente de humor negro–
en el palacio del gobierno le cambian la guardia al Chino
tañe contra el metal la pera del badajo
crujen el Destiempo y las mazmorras
en la iglesia el angelus
boira, almizcle, lagartijas
aún sobre el jardín, tibia y menuda
II
eugenia bonita de piel cetrina en el tiempo de napalm sin holocaustos ni trincheras como una virgen descalza tu serenidad sintoísta muy mordida cuerpo sobre cuerpo entero al óleo de sexo enamorado para ser yo y tus circunstancias para marte muy despacio suprimir la verborrea azogue bochorno y todo | pura sonrisa o taciturno medir esponjas paisajes lúdicos aguja formidable en noche de orejas torpes el beso inconforme ¿vendrás corazón conmigo? poco a poco tu caldo erótico a cámara lenta |
III
eugenia bonita del jardín de malvas
en suspensión abismal
pura,
pasión de gengibre
pura,
los años que te faltan
pura y embestida
la ausencia que me entrañas
¡por pura!
¡no por cata!
porque te he amado ferozmente
este adiós es un tributo
nuestra etapa se congrega
más el color del hilo de tu traje
más el sudor de labranza de mi acecho
las veinte en punto de tu cuerpo
tu pelo largo
y sereno
¡ay!
en cuál balbuceo de flores en qué himen roturado en qué bocanada de ensueño volveré a encontrarte tan bella en la cama como en mi memoria | pasión holocausto gengibre ¿dónde? |